-¿Sabes qué mierda nos pasa? Que da igual que vengan otros dos millones de chicos, que sean mucho mejores, más guapos, más altos, más simpáticos y que nos merezcan más. A nosotras no nos importa ninguno de esos, les queremos a ELLOS, da igual que sean unos cabrones, que seamos la última mierda en su vida, que nos destruyan, que nos pasemos noches y noches en vela pensando en ellos para nada, porque es para nada. Porque nos perjuramos y juramos que nunca les volveremos a hablar, que jamas volverán a saber de nuestra existencia y nos escondemos. Pero...en cuanto no podemos más, caemos, como tontas, y ellos saben que estamos ahí para cuando ellos nos quieren y que nos da igual que nos llamen a las tres de la mañana y nosotras estemos de puta madre con nuestras amigas, que si están en la otra punta de Valladolid, nosotras vamos, con nuestra mejor sonrisa y esperando que nos quieran incluso sabiendo que no se merecen ni mirarnos. Y eso...eso no puede ser.
Mira, tendríamos que liarnos con el tío más guapo esta noche y meterle nuestro número en el bolsillo del culo para que nos llamara mañana para follar y luego contárselo a ellos los pelos y señales y decirles que estamos de puta madre con él y que se jodan, que vean que no estamos ahí siempre ¡JODER!.
No se chica, ya se que ninguna de las dos lo vamos a hacer, pero mola desahogarse así de vez en cuando ¿No?
Pues eso.
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