15 sept 2013

Errores sonrientes.

Tan jodida está la vida, que una casi tiene que dar las gracias por encontrarse con algún individuo “semi-humano”. Por eso, sin darle demasiada importancia a lo que importa seguiremos dejando secar nuestras pieles al sol y lamiendo la sal del tequila de la palma de la mano los viernes por la noche con la excusa de siempre, exceso de lo que tú y yo sabemos…siempre con la sonrisa más roja. Siempre quedará alguien con quien tropezar.
Al día siguiente y como todas las jodidas mañanas me miraré al espejo y miraré el reflejo de alguien pasivo, observaré el reloj y veré como se mueve pero yo no notaré que el tiempo pase. Me sentiré igual. Parece ser que hace tiempo que deje de vivir, perdí una guerra que ni siquiera empecé.

Abriré la ventana, a lo mejor así se me airea el alma. En mi habitación huele a prozac.

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